SERVICIO DE LACADOS
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En Magosa contamos con una planta de lacado que ofrece los mejores resultados en cuestión de lacado de nuestra ciudad.
Somos especialistas en el tratamiento de lacado de superficies, ofreciendo una amplia gama de colores y unos acabados que dan mayor protección y una mejor estética. En Magosa realizamos trabajos de lacados de hasta 6,30 metros de longitud, que cumple con la normativa Quolicoat. Además, nuestros servicios son rápidos y eficaces, por lo que pueden contar con nosotros tanto particulares como empresas del sector para cualquier tipo de servicio que incluya lacado de superficie.
Para el proceso de lacado, primero dedicamos a la base una limpieza exhaustiva y profunda, ya que la higiene es fundamental antes de realizar cualquier acción sobre la misma. Además, debemos secar la superficie completamente tras su limpieza para que el lacado quede mejor fijo a las paredes. Tras todos estos pasos previos, procedemos al lacado en sí, teniendo especial cuidado en no contaminar el producto con polvo, por ejemplo. Dedicamos el tiempo que sea necesario para cada pieza, tratándolas individualmente y teniendo el mayor cuidado posible para proporcionar unos resultados finales de calidad y satisfactorios. Tras ello, volvemos a realizar un proceso de secado para que la laca quede fija en la base.
El proceso de acabado que le damos a nuestros productos es minucioso para que la entrega a nuestro cliente sea perfecta. Por ello contamos con los siguientes acabados; Carta RAL, Antibacterianos, Especiales, Texturados, Metálicos, Carta NCS.
Usamos productos caracterizados por su calidad y que dan unos resultados satisfactorios y excelentes, ya que estamos certificados por Qualicoat, Seaside y Qualideco. Nos importa que nuestros clientes se sientan cómodos y vuelquen su confianza en nosotros, por lo que atendemos personalmente a cada uno y le asesoramos para conseguir los mejores resultados finales.
En Magosa ofrecemos lacado de hierro y aluminio para cualquier tipo de superficie que desee.
El proceso de lacado de hierro y aluminio se prepara la superficie para un lavado con agua desmineralizada y su posterior introducción al horno. Así, llegará seco a la aplicación de polvo con las pistolas de proyección. Dicho polvo será atraído por el material de la superficie y quedará impregnado en el producto. Además, en el polimerizado estas partículas de polvo quedarán ya fijas, formando una capa uniforme que protegerá el producto.
Una vez el lacado de hierro y aluminio está listo, se pasa al almacenaje y expedición para comprobar que la superficie está en perfecto estado y el trabajo realizado ha sido correctamente llevado a cabo, con unos resultados satisfactorios.
Nuestros productos y hornos disponen de la máxima calidad, proporcionando unos resultados perfectos y dentro de los plazos determinados por el cliente. Además, somos muy estrictos en cuanto a los pasos y los procesos que deben llevarse a cabo.